Te explicamos todos los detalles sobre la fibra indirecta: en qué consiste, qué compañías la ofrecen, qué implicaciones tiene y cómo contratarla.
En el sector de las telecomunicaciones existen muchas cuestiones que resultan difícil de desentrañar. El desarrollo de distintas tecnologías a lo ancho del territorio nacional implica que se forjen alianzas entre compañías para ofrecer el mejor servicio al precio más barato. La fibra indirecta es uno de los servicios fruto de estos acuerdos entre compañías.
Qué es la Fibra indirecta
Muchas compañías de telecomunicaciones, por motivos de rentabilidad, no podían desplegar su propia red de fibra óptica por todo el territorio nacional. Existen muchas zonas aisladas con pocos clientes interesados en contar con conexión a Internet, por lo que a algunas compañías les resultaba complicado hacerles llegar sus ofertas.
Con el servicio de fibra indirecta, también conocido como NEBA (Nuevo Ethernet de Banda Ancha), los grandes operadores con una amplia red de fibra óptica ofrecen puntos de interconexión a otras compañías para que puedan suministrar sus servicios y tarifas a clientes que estén interesados en ellas. En otras palabras, un gran teleoperador alquila un ancho de banda determinado a otras empresas de telecomunicaciones que comercializan con tarifas de fibra.
Este acceso a fibra indirecta en España se fraguó a finales de 2010 cuando fue aprobado por la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMTC) y se empleó a utilizar en 2012. De este modo, se permitía a compañías que no podían desplegar su propia red de fibra, distribuir sus servicios y tarifas indirectamente a través de la red de otros.
El principal actor afectado de esta decisión fue Telefónica, obligado a compartir su red de fibra óptica en toda España, salvo en 34 ciudades. El organismo regulador buscó con esta maniobra un “equilibrio” para garantizar una competencia entre compañías y que todos los habitantes interesados en contratar fibra óptica tuviesen la oportunidad de ampliar su abanico de ofertas.
Qué compañías ofrecen Fibra indirecta
En el caso de España, la compañía que tiene la mayor red propia de fibra óptica es Telefónica (Movistar), alcanzando la friolera de más de 20 millones de hogares. La explicación es clara: esta empresa contaba con el monopolio público del mercado hasta que en 1996 comenzó el proceso de liberalización del sector. En el año 1999 la compañía lanzó su servicio de banda ancha de ADSL, por lo que desde los primeros momentos en los que comenzaron a comercializarse tarifas de conexión a Internet, contaba con ventaja que sus primeras competidores (Airtel o Amena).
Un momento histórico en este sentido se produjo en 2017, cuando Movistar y Vodafone firmaron un acuerdo por el cual el segundo tenía acceso a utilizar la red de fibra del primero por toda España. Vodafone contaba hasta entonces con una red propia de fibra óptica que alcanzaba 9,5 millones de hogares, y que dio el salto a los más de 20 que acumula Movistar.
En el fondo, todas las compañías son susceptibles de contar con fibra indirecta. Todo depende del interés de una empresa en alcanzar una zona determinada por lo que deben recurrir a la red de fibra de otro operador. No se trata de una opción para el cliente final: un teleoperador ofrece fibra indirecta cuando su propia red de fibra no alcanza el domicilio del interesado en contratar su tarifa.
Todas las compañías pueden ofrecer su red de fibra, para alquilar su ancho de banda a otras empresas interesadas en ofrecer sus tarifas allí donde no pueden llegar. Si atendemos a los grandes operadores que cuentan con mayor despliegue de fibra en nuestro país, encabezando el ranking encontramos a Movistar con su red de fibra óptica en más de 20 millones de hogares. Le sigue Orange, con su red propia de fibra en 13,8 millones de hogares, Vodafone con su fibra óptica propia alcanzando 10 millones y el grupo MásMóvil con cobertura propia en 6,1 millones.
Qué diferencias existen entre la fibra directa e indirecta
No se puede señalar una diferencia destacable entre ambos tipos de fibra, ya que básicamente consiste en la cesión o alquiler de una red de fibra óptica entre compañías. Lo único que se puede señalar es que, dependiendo de la compañía y los términos en los que haya negociado la contratación, puede que el precio de la fibra indirecta sea mayor. Además, la compañía no tendrá margen de ofrecer todas sus tarifas de fibra óptica, sino que dependerá de la velocidad de red de la fibra indirecta.
Cómo contratar Fibra indirecta
Como hemos comentado anteriormente, no existe posibilidad de elegir entre fibra directa e indirecta: una compañía ofrecerá siempre su red de fibra propia allá donde la tenga disponible. En el caso de que su red de fibra no alcance la zona del cliente interesado, recurrirá a la fibra indirecta de otra compañía para ofrecer su tarifa. De este modo, cuanto menor sea la red de fibra óptica propia de una compañía, mayores probabilidades habrá de contratar fibra indirecta, tanto sea la fibra Jazztel, de Yoigo o de Orange.
Aquí puedes consultar las ofertas de fibra más atractivas del mercado. Dependiendo de la zona donde habites, puede que la cobertura de fibra con la cuentes pertenezca a una compañía u otra.
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