Ante las circunstancias que nos han tocado vivir en el 2020 y lo que llevamos de 2021, nadie se sorprende al enterarse de que 3 de cada 4 hogares hayan realizado compras online en nuestro país en esta temporada, o que un 74% asegure que seguirá haciéndolo, según Kantar, empresa líder de datos y consultoría.
Pero no solo los ecommerce, sino también los comparadores online, que ayudan a miles de usuarios a elegir los mejores productos y servicios, se han visto beneficiados durante la pandemia, experimentando un crecimiento en algunos casos de hasta un 500%.
Creado el hábito y perdido el miedo al ecommerce, lo seguro es que las compras online continuarán en aumento. Y esto se debe no solo a la innegable comodidad de comprar sin salir de casa, sino también a los servicios ofrecidos por estas tiendas online tales como entregas en 24 horas, en muchos casos gratuitas, facilidades a la hora de hacer una devolución, o un servicio de atención al cliente omnicanal son algunas de ellas.
Comprar en internet de forma segura
No obstante, a pesar de los esfuerzos de las tiendas online por dar confianza y seguridad a los consumidores gracias a certificados de calidad europeos e internacionales o mejores pasarelas de pago, todavía corremos el riesgo de ser víctimas de algún tipo de fraude o estafa por internet.
Es por ello que debemos tomar una serie de precauciones a la hora de efectuar pagos online, así que vamos a hacer un resumen de las más importantes.
No uses WiFis públicas durante la compra online
En este caso, vale la pena consumir nuestra tarifa de datos. Cuando usamos redes públicas, nuestros datos privados pueden ser interceptados por otros usuarios, incluyendo por supuesto nuestros datos de pago.
Lo más sensato en este caso es dejar las redes gratuitas de establecimientos públicos para navegar por internet en general, pero pasarnos a nuestra tarifa de datos móviles o red doméstica si vamos a introducir contraseñas, números de tarjetas o cualquier otra forma de pago.
Si no puedes esperar a comprar desde casa usando el internet de tu compañía de forma segura, otra opción es usar una VPN (Virtual Private Network) que asegure la confidencialidad durante el proceso de compra.
Infórmate sobre la tienda online en cuestión
Si vas a comprar en un ecommerce que no conoces, asegúrate de que es un sitio fiable. No solo se trata de revisar comentarios y valoraciones de clientes previos que hayan comprado a través de esta web, sino de comprobar también que cumplen con protocolos de seguridad tales como:
- Una url que empiece por HTTPS (y no HTTP), lo que indica que existe una conexión segura entre servidor y cliente que no puede ser interceptada por terceros
- Un botón de identidad de sitio, o lo que es lo mismo, un icono de candado verde en esta url que nos indique que el contenido de la página se muestra encriptado
Ten cuidado también con posibles redirecciones a otras webs y comprueba que la página donde vayas a comprar presente un apartado con información legal, política de privacidad, qué cookies se recogerán, etc.
Utiliza plataformas de pago y contraseñas seguras
Todos caemos en el error de usar la misma contraseña en múltiples plataformas. Es lo más cómodo para recordarla y evitar tener que verificar accesos y cambiarla a la hora de usar una cuenta. No obstante, no es lo más recomendable en lo que a plataformas de pago se refiere.
Si vas a usar la misma contraseña en tus distintas redes sociales u otro tipo de cuentas gratuitas, intenta usar una contraseña alternativa y segura para las plataformas de pago: asegúrate de que contiene al menos siete u ocho caracteres, además de números y algún símbolo. Y por supuesto, que no coincida con ninguno de otros datos visibles, tales como nombre, apellidos, o dirección.
Comprueba también que la tienda online a la que accedes ofrezca varias formas de pago, entre ellas PayPal o similares. De esta forma no solo no tendrás que introducir los datos de tu tarjeta directamente en la web, sino que estarás más cubierto en caso de necesitar un reembolso por un producto que nunca llega.
Por último, desconfía de aquellas webs o tiendas online que solo permiten el pago mediante transferencia bancaria, por mucho que confíes en que tu banco te permitirá cancelar cualquier tipo de pago fraudulento.
Mantén tu móvil actualizado
Esto también se extiende a aplicaciones móviles en caso de que vayas a comprar a través de alguna de ellas. Y por supuesto, a tu ordenador de mesa.
Tanto en el software de tu dispositivo móvil como en las apps de tus tiendas favoritas pueden producirse brechas de seguridad que los propios responsables se encargarán de solucionar cuanto antes lanzando la actualización pertinente. Por eso es tan conveniente mantener todo en la última versión disponible, y nunca está de más contar con algún tipo de antivirus instalado que pueda avisarnos de cualquier amenaza o web fraudulenta.
Revisa tus movimientos bancarios de forma periódica
Especialmente si llegas a introducir los datos de tu tarjeta de crédito o débito en una página web o cualquier tienda online, es conveniente que compruebes después con tu banco que los cargos que aparecen en tu cuenta bancaria se corresponden con las compras realizadas.
La gran mayoría, por no decir la totalidad, de entidades bancarias hoy en día disponen de su propia app móvil desde donde podemos revisar movimientos y cargos realizados en nuestra cuenta. Por ello es más que recomendable comprobar de forma periódica que no haya movimientos sospechosos o cargos desconocidos, para descartar posibles robos de identidad.
En caso de que esto sucediese, no dudes en ponerte en contacto con tu banco de inmediato para que puedan tomar las medidas oportunas.
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